Estos innovadores tornillos están meticulosamente diseñados para transformar su trabajo con sustratos duros como el metal o el plástico.
A diferencia de los tornillos de máquina normales, poseen la capacidad excepcional de roscar sus propios orificios dentro de unos límites razonables de dureza y profundidad del sustrato.
Y esta característica se consigue creando un hueco en la continuidad de la rosca, formando una acanaladura y un filo de corte similares a los de un macho de roscar.
En resumen, con los mejores tornillos autorroscantes para acero, ganará en comodidad y eficacia sin igual, garantizando un trabajo preciso y sin esfuerzo.












