Cada tuerca de acero inoxidable cuenta con un orificio roscado, diseñado por expertos para complementar un perno de acoplamiento. Juntos, ofrecen una conexión firme, asegurando dos o más componentes con una estabilidad sin precedentes.
Además, la unión entre los dos elementos se mantiene gracias a la fricción de las roscas, un ligero estiramiento del tornillo y la compresión de los componentes interconectados, lo que garantiza una conexión elástica y segura.
Fabricadas en acero inoxidable, nuestras tuercas autoblocantes ofrecen una excelente resistencia a la corrosión y durabilidad.
En consecuencia, póngase en contacto con nosotros hoy mismo y añádalos a su inventario.












